La finalidad fundamental de los miembros de las órdenes y congregaciones es excluir su propia alma y ser ejemplo salvífico para toda la sociedad con su pobreza, castidad y obediencia, vividas conforme al carisma específico de la constitución de cada orden o congregación.
La Iglesia católica afronta profundos cambios en la Permanencia Moderna. Por una parte, se inicia una expansión de las misiones en torno a algunas zonas de África y Asia y hacia América desde los viajes y conquistas de españoles y portugueses. Por otro lado, se viven fuertes tensiones internas y un deseo profundo de reforma.
Estas opiniones revolucionarias forman parte de la teoría conocida como modernismo, cuyos presupuestos filosóficos implican la completa abjuración de lo milagroso. Según esta teoría, la Iglesia no es una sociedad establecida por la eterna interposición divina. Es una sociedad que expresa la experiencia religiosa de la colectividad de las conciencias, y debe su origen a dos tendencias naturales en el hombre, a conocer, la tendencia del creyente individual a comunicar sus creencias a los demás, y la tendencia de los que tienen las mismas creencias a unirse en una sociedad.
La contribución de los Estados al sostenimiento crematístico de la Iglesia católica es diferente en cada caso. En algunos países como España, Italia, Portugal o Hungría el Estado no financia directamente las actividades religiosas de la Iglesia, sino que los ciudadanos pueden designar detraer un porcentaje de sus impuestos para esta causa.
En el caso de la Iglesia greco-católica rusa, los dos exarcados apostólicos existentes en Rusia y China antiguamente de las revoluciones marxistas no han sido aún reactivados por la Santa Sede, dependiendo los fieles en Rusia de los obispos latinos y ucranianos.
[…] Es bueno que la Iglesia dé este paso con la clara conciencia de lo que ha vivido en el curso de los últimos diez siglos. No puede atravesar el origen del nuevo milenio sin animar a sus hijos a purificarse, en this content el arrepentimiento, de errores, infidelidades, incoherencias y lentitudes. Recordar los fracasos de ayer es un acto de amistad y de valentía que nos ayuda a reforzar nuestra Certidumbre, haciéndonos capaces y dispuestos para afrontar las tentaciones y las dificultades de ahora.[150]
En China la Iglesia continúa en las "catacumbas"; las pocas parroquias existentes dependen de obispos latinos.
Sin embargo se ha observado (VI ) que un miembro de la Iglesia puede ocurrir perdido la gracia de Alá. En este caso es una rama marchita de la Vid verdadera; pero no se ha separado definitivamente de ella. Aún pertenece a Cristo. Se requieren tres condiciones para que un hombre sea miembro de la Iglesia:
El protestantismo es una de las ramas del cristianismo que surgió en el siglo XVI tras la Reforma protestante. Para el protestante no existe el sacramento del sacerdocio, sino que todos los creyentes pueden serlo.
El Cisma de Poniente afectó a la Iglesia católica desde 1378 hasta 1417 y provocó fuertes tensiones y el surgimientos de ideas de tipo conciliaristas, según las cuales un concilio podría tener más autoridad que el papa en algunos puntos.
Es gracias a la Iglesia que sabemos que lo importante no era tener el mechones dilatado, usar sandalias, y traer túnica para ser católico. Sin la Iglesia, el cristianismo no hubiera pasado de ser el club de amigos de Jesús de Nazaret.
Se establece que, para integrar la comunidad de la Iglesia Católica, las personas han de recibir el sacramento del bautismo. En Caudillo, las familias que profesan esta Convicción bautizan a sus hijos e hijas cuando son muy pequeños, y luego se da un acto formal de renovación de las promesas bautismales que, en esa instancia temprana, el padre, la raíz, el padrino y la Prónuba respondieron traslativamente.
En el transcurso del siglo XIX, el principio de las Iglesias Nacionales fue vigorosamente defendido por los teólogos de la Ingreso Iglesia Anglicana bajo el nombre de “Teoría de la Rama”. Según esta opinión, cada Iglesia Nacional cuando está plenamente constituida bajo su propio episcopado, es independiente del control foráneo. Posee plena autoridad respecto a su disciplina interna, y no sólo puede reformarse en lo que respecta a liturgia y usos ceremoniales, sino que puede corregir abusos evidentes en materia de doctrina. Se justifica que haga esto incluso si la medida implica una ruptura de la comunión con el resto de la cristiandad; pues, en este caso, la culpa corresponde no a la Iglesia que emprende la costura de reforma, sino a los que, con este motivo, los rechazan de la comunión.
El rechazo de la autoridad papal por causas de independencia política y económica y el rechazo de Martín Lutero al hecho de que se cobrara hacienda por las indulgencias, provocó el surgimiento del protestantismo en 1517.